El cuerpo humano es tan sabio que puede desintoxicarse por sí mismo, pero son nuestros hábitos los que hacen que este proceso natural se vea entorpecido. Los efectos del mal estilo de vida, la mala alimentación y demás excesos, se ven claramente reflejados en nuestro exterior, solo basta con mirarnos el cabello, la piel, uñas y prestar atención a lo que sentimos, nuestras emociones también se ven afectadas, dado que todo el proceso interno va de la mano con lo que hacemos en el exterior.
Es sabido que día tras día el organismo trabaja en miles y miles de funciones que generan reacciones bioquímicas, al igual que residuos producidos por nuestro metabolismo, estos desechos también son producto de las costumbres no tan saludables que tenemos, la contaminación y la exposición solar sin protección.
Siempre recomendamos un consumo amplio de vegetales, frutas, verduras y agua, en internet puedes encontrar algunas aplicaciones que te ayudan a saber la cantidad de líquidos que debes ingerir de acuerdo a tu peso corporal, aunque se sabe por regla que son mínimo 8 vasos o dos litros,diarios.
Agentes externos que contaminan nuestro cuerpo
La exposición diaria a factores externos contaminantes es bastante alta, el aire, el agua, los diferentes productos de belleza, higiene, limpieza, entre otros no naturales, al igual que los alimentos procesados y sus ingredientes no orgánicos que consumimos.
Podríamos hacer la comparación de nuestro cuerpo y decir que es como una esponja, absorbe todo, desde los elementos que aplicamos en nuestra piel, que ingresan por los poros hasta nuestra sangre haciendo que los órganos tengan que filtrarlo, así añadiendo más trabajo a estos. Ellos podrán hacer bien su labor , o no tanto, de acuerdo a cómo los hemos cuidado, pues es de saberse que continuamos vivos gracias a como ellos funcionen.
¿Alguna vez has revisado los filtros del aire acondicionado, o los de tu carro? Tienes claro que es necesario limpiarlos o estos se deterioran y causan daños más grandes que pueden resultar bastante graves, bueno , pues es casi así que funciona desintoxicar nuestro cuerpo, haciendo claridad que nosotros funcionamos las 24 horas del día, todo el año, y sin parar.
Dicho esto, hoy queremos compartir contigo algunos hábitos que puedes implementar en tu día a día para alivianar la carga que tienen tus órganos a la hora de repararse:
- Hidrátate:
Asegúrate de beber una buena cantidad de líquidos, en especial agua, para mantenerte hidratado, aquí no son buenos incluir bebidas gaseosas, ni jugos o cafés con azúcar. Recuerda beber en función de tu sed y tus necesidades.
- Consume alimentos frescos:
Elegir alimentos frescos y de origen natural aportarán bastante a mejorar nuestra salud y nuestro peso, las carnes, cereales y demás también deben incluirse, recuerda que no es la cantidad si no la calidad la que trae beneficios. No es necesario excluir alimentos, de igual manera puedes visitar a un especialista para que te oriente mejor sobre tu alimentación.
- Ejercítate:
¡Sacúdete! Camina, corre, baila, ve en bicicleta, haz yoga, practica algún deporte o actividad que te haga sudar, esto ayudará a expulsar toxinas y a que tu corazón bombee con suficiente fuerza, no solo se beneficia tu parte física, el ejercicio es sanador y ayuda a mejora tu salud mental.
- Consume jugos verdes:
- Respira:
Así es, deja que tus pulmones se limpien con una respiración profunda, puedes hacer ejercicios, estos ayudarán a que te relajes, es recomendable hacerlo antes de dormir esto ayudará a que puedas conciliar el sueño con más facilidad.
- Duerme bien
Nuestro cuerpo hace el trabajo “pesado” mientras dormimos, así que es muy importante que le brindes el espacio necesario para poder hacerlo, así que trata de dormir de 7 a 8 horas diarias, así notarás la mejoría en cuanto a tu digestión y demás funciones de tu organismo.
